El siguiente texto fue editado por última vez antes del 1 de mayo de 2021, antes de la plena entrada en vigor de la Ley del juego, introducida por el Real Decreto 958/2020, de 3 de noviembre. Por ello, cualquier mención que, en su caso, pudiera hacerse en esta web relacionada con bonos, ofertas o promociones de cualquier tipo, no deberá tenerse en cuenta por el usuario localizado en España. Esta restricción no aplica a usuarios no localizados en España.
Una de las estrategias que se pueden llevar a cabo es jugar con muchos cartones. Cuantos más, mejor, en la medida en que seamos capaces de llevarlos todos (y si no somos capaces, para eso está la función Auto-Daub).
Es conveniente siempre que sea posible, jugar con más de un cartón, aunque salga económicamente más caro, porque jugando con más cartones aumentamos las probabilidades de tachar más números y por tanto de llevarnos más premios.
Una de las estrategias que se pueden llevar a cabo es jugar con muchos cartones. Cuantos más, mejor, en la medida en que seamos capaces de llevarlos todos (y si no somos capaces, para eso está la función Auto-Daub).
Es conveniente siempre que sea posible, jugar con más de un cartón, aunque salga económicamente más caro, porque jugando con más cartones aumentamos las probabilidades de tachar más números y por tanto de llevarnos más premios.
Una de las estrategias que se pueden llevar a cabo es jugar con muchos cartones. Cuantos más, mejor, en la medida en que seamos capaces de llevarlos todos (y si no somos capaces, para eso está la función Auto-Daub).
Es conveniente siempre que sea posible, jugar con más de un cartón, aunque salga económicamente más caro, porque jugando con más cartones aumentamos las probabilidades de tachar más números y por tanto de llevarnos más premios.
Pero, ¿cuál es el número conveniente de cartones para jugar? Esto dependerá de tres factores fundamentalmente:
Lo que escojamos dependerá de lo ambiciosos que seamos; si somos muy aventureros, puede que optemos por un premio mayor, aunque tenga más jugadores y los cartones valgan más. Si tiramos a conservadores en el juego, mejor optar por alguna de las dos primeras opciones.
Además, hay que tener en cuenta que uno debe jugar con el número de cartones que sea capaz de abarcar; si somos capaces de llevar 4, estupendo. Si llevamos 4 cartones pero nos enteramos de la mitad de los números, tendremos que optar por coger menos cartones, o por la famosa función de Auto-Daub (si es posible).
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