Los juegos de bingo nos han acompañado toda nuestra vida: cuando íbamos con familiares a una sala, jugando en la zona común de los apartamentos de verano, en la casa familiar del pueblo con los vecinos… un juego tan tradicional y popular ha saltado a las salas online para llegar a todo tipo de público y apareciendo un nuevo perfil de jugador.
Nuevo jugador del bingo online
Los juegos de bingo nos han acompañado toda nuestra vida: cuando íbamos con familiares a una sala, jugando en la zona común de los apartamentos de verano, en la casa familiar del pueblo con los vecinos… un juego tan tradicional y popular ha saltado a las salas online para llegar a todo tipo de público y apareciendo un nuevo perfil de jugador.
Nuevo jugador del bingo online
De igual manera que ocurre en el bingo tradicional, lo que se pretende en las plataformas de bingo online es que el jugador pase un buen rato, se relaje y tenga su momento de desconexión.
Lo bueno de que el bingo haya pasado a la web, es que puedes jugar donde quieras y cómo quieras, haciendo paradas a la nevera de casa, descansando debajo de una sombrilla en la playa o mientras desconectas respirando aire puro en el parque.
Como el bingo puede llegar ahora a todos los lugares, es lógico que también haya llegado a un nuevo tipo de público encantado de poder jugar desde las plataformas online. Uno de estos nuevos perfiles es el de la joven jugadora independiente y trabajadora, que llega a casa después de un día de vértigo, se relaja en su lugar favorito de la casa y aprovecha para jugar. El bingo online permite además, que esta joven pueda compartir el juego o el día a día con otros jugadores a través del chat, pudiéndose incluso reunir en la web con sus amigos de toda la vida.
El bingo online es una nueva forma de compartir tu tiempo con viejos amigos o hacer nuevos a través del chat de la plataforma mientras se vive la emoción del juego.
Hay otro tipo de jugador que ha aparecido con las nuevas salas online de bingo, y son aquellos que se esconden detrás de la pantalla del ordenador por timidez o por vergüenza. Se trata de un jugador tímido, al que le incomoda ir solo a una sala de bingo o, simplemente, se siente más seguro rodeado de su acogedora y conocida casa. Este jugador encuentra en las salas online, el mejor y más cómodo lugar donde poder desarrollar su juego.
Y, por otro lado, está el hombre joven que considera que el bingo es un juego de chicas, y que no tiene la valentía suficiente para decir públicamente «yo también juego al bingo«. En público dirá que no, pero en privado es un nuevo perfil de las salas de bingo online, donde puede pasar de incógnito y aprovechar para conocer gente.
Hay un nuevo perfil de jugador de bingo asiduo a las plataformas online. Seguro que con el tiempo aparecen muchos más por la facilidad de registrarse para jugar y las grandes promociones de dinero y cartones gratis que ofrecen estas nuevas salas de bingo en la web.